Pero si tuviera que pensarlo un toque así, el pony bien podría bien ser el que toca la guitarra al costado de la Iglesia.
Como árbol, la verdad, el tamarisco es gordito, su resistencia carece de elegancia pero todo, ya se dijo, no se puede eh.
hoy vamos por grunge, la otra semana tendremos si queremos, punk.
autocita vía PZ
Más felicidad
Felix Bruzzone acaba de publicar su primer libro y eso me pone feliz.
El libro es muy lindo y ojalá lo lean muchas personas lindas.
Lo editó Tamarisco, así que doble felicidad. Me gustaría que todos los autores que publicamos se quedaran en Tamarisco, pero esa es otra discusión para otro momento. Hoy leí en el Rojas y más temprano por el horario de trabajo no pude buscar 76 en la imprenta. Y cuando terminé de leer en el Rojas, y se prendieron las luces de nuevo estaba Sebastián con la sorpresa: varios ejemplares del libro que había dejado Vanoli para mí porque no pudo quedarse hasta el final y este es el típico post condenable por tierno y cursi, un poco emocionados estamos pero cuantas gracias hay que dar.
A carla gnoatto. A celia dosio, a federico falco, a leo oyola, a leonel livchits, a julián urman, a damián terrasa y juan incardona para empezar. y una lista más grande, mucho más grande de los silenciosos que ayudan a seguir, y a leer, y a editar.
Bla blá bla. Compren el librrrooo!!
planificando la semana
Confesionario + Música
Música: Rosario Bléfari
Confiesan: Manuel Esnoz sobre la pornografía y sus sutiles diferencias
y yo, sobre cosas más naif.
Confesora: Cecilia Szperling
Gratis- Martes 24 de junio- 20:30 hs- Sala Abuelas. CCRRojas. Corrientes 2038.
"Voy aprendiendo"
acá Mariano
D'Andrea
le pregunta cómo va a ser el show:" Es la primera vez que toco en un teatro "de esos" en Buenos Aires. Antes nunca me había sucedido eso se ir caminando por estas calles y ver carteles gigantes anunciando mi show. Me pasó que vi que algunos estaban rotos, como si los hubieran querido arrancar y pensé '¡qué mala onda! Inmediatamente me explicaron que esa es una buena señal, porque quiere decir que se los quieren llevar para ponerlos en su dormitorio y esas cosas. Voy aprendiendo."
invasión
Pienso en Argentina, las diversas vivencias de los pueblos, lo que significa invasión.
tarde de sábado
Un papel impreso: word y notas a mano. No una hoja A4 entera si no un cachito, recortado sin tijera.
Lo perdí.
Ayer hice un cuestionario para un editor dandi al que veo el lunes. También leí un poco de un libro de Iván Bunin. Violencia y relatos potentes, entre el odio y la negación; agarré de un estante un libro de la revolución rusa porque se pierden algunas cosas; libro de consulta.
Escribo el texto para el confesionario y desde la ventana se ve el cielo despejado.
"El problema es que la gente no quiere laburar" piensa alguien.
No conseguí el Indesign para pasar las correcciones del librito de cuentos. Estoy atrasada con eso.
Lo eventos se mezclan y de a uno dan alegría. El cielo despejado es un buen argumento para pasarla bien. Cuando sueño grito gracias, gracias, gracias pero al despertar no recuerdo lo que soñé.
el conductor, la modelo, la cava y la cacerola
LECTURA + FERIA DE LIBROS (tamarisco included)
| Sonia Budassi |
| Juan Guinot |
| Julián Urman |
| miércoles 11 junio |
| CC ZAS - Moreno 2320 - 22 horas |
| entrada gratis |
| reenviá, piruchx |
"obseyon, obseyon"
como respuesta
recibo
una sola palabra,
y encima
en mayúsculas:
“¡¡¡¡OBSESIVA!!!!”
(ya van a venir con el equino exhausto)
-nesquik en lata.
-barbie original
-casa de la barbie
-pequeño ponny original
-yolly bells
-muñeca grande con vestido de novia
-papel glacé metalizado
-bicicleta nueva/de carrera
-papeles de cartas de sara kay
-tapados de madres para robar un rato
-facturas de dulce de leche
-collar rojo para el gato
-maquillaje de jugar
-vestido de primera comunión tipo princesa/tipo novia
-Sandokan
Lujos campestres
-una lechuza en el patio
-dos conejos
-un agilucho
-bolsa de agua caliente en la cama
-caballo en cuero/andar a pelo
-caballo con montura
-subir a la cosechadora abandonada
-un tronco enorme para hacer una casa
-una campera gorda con plumitas
-buscar los huevos en el gallinero
-llamar a la chancha/chancho por su nombre y que venga
-no tener que levantarse a ordeñar
-Sandokan
el pacha a media marcha
Igual sabemos que se va a rehabilitar (¿se dice así?)
Acá te cuentan toda la historia; pero por lo pronto, se puede dar una mano así:
"-Buscar lugares adonde seguir haciendo lo que hacemos, ya sea derivar fechas o hacer las nuestras, incluso las cosas que nunca pudimos hacer como bailar o aplaudir o darle maza al gas y pumpitap! Ya sea lugares existentes o en alquiler, galpones o casas, bares o boliches.
Estamos buscando información sobre otros lugares similares, y gente que pasa o paso por lo mismo. Cualquier información la podes enviar a:
ccpachamama@gmail.com
o llamar al 4864 2886.
Ademas esten por favor atentos al blog, donde postearemos avisos, actividades, y pedidos:www.ccpachamama.blogspot.com"
si me preguntan contesto
-"¿Un editor independiente es un pequeño editor?"
-No.
Los mejores libros no están hechos para dar respuestas. Los lectores a veces sí.
Los clásicos para principiantes
Editorial: FCE/Siruela, $ 49
Otras obras del autor: La tercera condición, Una historia de amor y oscuridad, Un descanso verdadero.
Hay un momento en la carrera de ciertos escritores en el que las editoriales se desesperan por publicarles casi cualquier texto. En esta etapa, el "narrador consagrado" se anima a dejar momentaneamente el género de ficción que lo hizo famoso y se inclina por escribir ensayos, textos autobiográficos o lecciones literarias. Autores disímiles como Haruki Murakami, Martin Amis, Carlos Fuentes, y también el israelita Amos Oz (1939) han explorado ese camino y sus nombres suenan, cada tanto, como posibles Premios Nobel. Oz es novelista y uno de los fundadores del movimiento pacifista Shalom Ajshav, ha recibido premios como el Goethe y el Israelí de Literatura. Ya ha publicado su autobiografía, Una historia de amor y oscuridad y Contra el fanatismo, ensayo en el que se pronuncia en contra del enfrentamiento entre israelíes y palestinos. Es probable que a esta altura el autor y sus editores sean conciente de los posibles efectos de estas publicaciones heterogenas y políticamente correctas. En este contexto puede leerse La historia comienza. Ensayos sobre literatura, un libro basado en el material que Oz ha utilizado en sus clases y conferencias en la Universidad de Boston, entre otras.
La introducción, titulada Pero ¿qué existía antes del Big Bang?, habla de la dificultad para enfrentar la "hoja en blanco" y anticipa un manual de técnicas sobre como empezar una historia, narrando la manera en que algunos escritores comienzan a escribir, no necesariamente desde lo que será el principio del relato, si no por la escena que consideran más "fácil". Sin embargo, a las pocas páginas, el libro termina por proponer lecturas y no consejos prácticos. Es prometedor el fragmento en que se critica el principio de Una historia de amor sentimental (de las memorias de un soñador) de Dostoievsky, pero el impulso iconoclasta que intuímos se desvanece enseguida: se redime aquel comienzo repleto de "banalidad sentimental" por la proximidad del narrador con el personaje. "La frase de inicio es deliberada y premeditadamente penosa", justifica Oz.
Comienzos ejemplares. Si la introducción amenaza con ser un manual disimulado de "Cómo escribir un buen comienzo", cada capítulo estará dedicado a lo que podríamos llamar "comienzos ejemplares" de autores consagrados del Siglo XIX y XX: Gogol, Chejov, Kafka, Carver y García Marquez, entre otros. El corpus insinúa un propósito ambicioso: brindar nuevas lecturas sobre textos conocidos de autores clásicos.
El método de Oz consiste en citar la primer página o escena de un texto. Luego, hacer un análisis inmanente de esos párrafos para, acto seguido, describir el resto del relato. Oz cuenta sin escatimar detalles, sin dejar sombra de misterio cada avance de la trama; principio, nudo y descenlace. El objetivo es revelar cuál es el "contrato" propuesto al lector desde las primeras líneas (Oz los clasifica en contratos "engañosos", "filosóficos", en algunos casos, no encuentra una palabra precisa que los defina). Para deducir cuál es el pacto de lectura se vale, entonces, del análisis de la forma en que se dosifica la información, la sintaxis, los personajes y su comportamiento, el ritmo de la prosa de las primeras líneas; pero luego busca comprobar su tesis relatando lo que sucede en la obra hasta el final. Sobre Effi Briest, de Teodor Fontane escribe: "Una rápida ojeada al principio de la narración revela únicamente un mundo inmóvil y despoblado. Más exactamente, un mundo inanimado. Y aún más exactamente: unos objetos inmóviles que imponen su inmovilidad". Luego de dos páginas, concluye que esta obra exige una lectura "lenta y pormenorizada: sin una observación prolongada no podemos oír la totalidad del silencio y la inmovilidad". Más allá de esa lógica lineal, el problema es que las apreciaciones de Oz no parecen moverse de ciertas obviedades o lugares comunes sobre esos autores. Esto ocurre cuando afirma, por ejemplo, que en los cuentos de Carver se trabaja sobre una "censura emocional" contruida a partir de hacer explícitos ciertos eventos violentos o sexuales. Las lectura que ofrece Oz, entonces, es la sedimentada por una larga tradición de críticos y hasta por instituciones educativas; sus ideas resultan reiterativas y escolares. Si bien sus conclusiones son correctas, su obsesión por encasillar cada obra genera un análisis estático y convencional; un ejercicio de insistencia sobre lo que ya se sabe y ya se ha dicho, que anula cualquier posible curiosidad por volver a los textos citados. Si no comete grandes errores –es verdad que los personajes kafkianos no tienen control sobre lo que les sucede; por ejemplo- tampoco toma ningún riesgo.
De prosa ágil y coloquial, el libro termina ofreciendo un resumen de todas las historias que cita. Es difícil, entonces, imaginar un tipo de lector para La historia comienza, más allá de algún estudiante perezoso al que ante el encargo de un profesor de leer un clásico, prefiera ver la película.
Reseña publicada en el Suplemento de Cultura del Diario Perfil. Mayo 2008.